¿Te gusta el turismo cultural? ¿Aprovechas tus vacaciones para visitar pueblos y ciudades? En este caso, seguro que recorres sus templos para hacer fotos en iglesias y catedrales.

De hecho, monumentos como la Mezquita de Córdoba o la Catedral de Santiago son los más visitados de España. Por eso, vamos a ver algunos consejos para sacar partido a nuestra cámara y tomar mejores fotos en estos lugares.

Ante todo, respetuosos

Lo primero que debes hacer es de sentido común: preguntar si se puede hacer fotos o no. No estamos en un monumento al uso, sino en un lugar de culto religioso. Tiene determinados horarios, hay gente rezando y puede haber zonas acotadas.

Generalmente es posible si no hay misa, se trabaja en silencio y sin molestar, y no se utiliza el flash. Sobre este último, no tiene sentido usarlo para hacer fotos en iglesias y catedrales. Son espacios enormes y no tiene alcance suficiente. Aunque se dispare, no iluminará lo que quieres retratar.

Teniendo esto en cuenta, y las escasas condiciones de iluminación de estos lugares, necesitarás un trípode. Si no tienes uno, o no puedes utilizarlo -hay iglesias que no lo permiten-, deberás ajustar la configuración de la cámara para ganar luz.

Utiliza valores ISO altos que te permitan emplear una velocidad de obturación lo suficientemente rápida para que las imágenes a pulso no salgan movidas.

En este tipo de situaciones es importante que estés familiarizado con el ruido de tu cámara. Y que conozcas cuál es el valor ISO máximo que puedes permitirte para que la calidad sea aceptable.

De todas formas, al sacar la foto intenta apoyarte en el respaldo de un banco, por ejemplo. Otra buena idea es llevar un mini-trípode.

Mira hacia arriba

Antes de hacer fotos en iglesias y catedrales, consulta los horarios de apertura y de misas para ir con tiempo. Así podrás explorar primero la localización, buscando ángulos inusuales.

La toma más evidente es una visión de la nave en gran angular. Pero una vez sacada, lo mejor es buscar objetos y puntos de vista diferentes.

Yo, por ejemplo, estoy elaborando un bestiario con detalles de capiteles, gárgolas, etc. en los que aparecen diversas criaturas. Mira bien a tu alrededor y no te centres sólo en lo más emblemático.

Por supuesto, no dejes de dirigir la vista hacia arriba. Las cúpulas guardan uno de los mayores tesoros de este tipo de templos.

A la hora de hacer fotos en iglesias, pregunta si ofrecen visitas a las torres, coro y galerías. Los contrapicados y tomas cenitales que obtendrás serán espectaculares.

Y tampoco olvides las pautas de las tomas arquitectónicas. Aprovecha los arcos, ventanas, puertas, etc. para encuadrar tus imágenes.

A determinadas horas entra luz por las vidrieras, rosetones, etc. Utiliza los claroscuros de esta esta luz dura para dotar de dramatismo a las esculturas y otros motivos.

Finalmente, aunque tendemos a sacar fotos horizontales, porque se corresponden con el campo de visión humana, haz algunas en posición vertical. Subrayarás la sensación de altura y amplitud de estos templos.